martes, 16 de febrero de 2016

Capítulo 2. El Elemento



2. Pensar de Forma Diferente
Damos por hecho que nos conocemos. Y también que la Inteligencia, en su sentido más amplio, se corresponde con la capacidad que tenemos para resolver cuestiones matemáticas y utilizar adecuadamente palabras para comunicarnos.
Entender el Elemento es complicado ya que la Inteligencia no tiene un solo significado y no es tan voluble como las diferencias que existen entre las personas.
Es por ello que para buscar tu Elemento, no tienes que notar solamente lo que das,  por supuesto acerca de cuáles pueden ser tus talentos y habilidades. Existen tantos talentos y habilidades como personas, y el hecho de no encontrar las tuyas en una lista o a través de un test, no significa que no las tengas. En general, lo que normalmente pasa, es que no las encuentras porque lo das por hecho. Dado que ya forman parte de ti, no les prestas atención, te pasan desapercibidas, ya que lo que ves día a día.
Por ejemplo, el gimnasta Bart Conner no era un alumno destacado de su clase, pero se pasaba el día haciendo cabriolas enfrente de su familia, amaba hacerlo. Al principio parecía que lo que hacía no tenía mucho caso , hasta que un día un maestro vió en él un gran potencial, le invitó a visitar un gimnasio. A partir de ahí su historia se lleno de éxitos.
REFERENCIA: Ken Robinson. (2009). El Elemento. ITESM: Conecta. 

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